Estamos seguro que ya habrás visto más de una vez en alguna revista o alguna web fotos de esos nuevos inodoros, water y bidé suspendidos, como si estuvieran levitando en el baño, ¿ a que sí?. No nos extraña que hayas deseado colocar uno en tu cuarto de baño. Por eso hoy te explicamos las ventajas e inconvenientes de los inodoros y bidés suspendidos. ¡Vamos allá!
Ventajas
En general podemos decir algunas características de esos tipos de water suspendidos y es que son menos pesados, más pequeños, más discretos a la vista otorgando un toque moderno al baño y además tienen la cisterna oculta, con lo cual adoptan una forma geométrica más suave, y limpia. Vamos a continuación a detallar más características de ellos.
- Como decíamos estas piezas de inodoro , water y bidé, son visualmente más ligeras y a la vez más discretas y dan una sensación de ser más pequeñas, porque digamos que se encuentran más recogidas en el baño.
- Son un verdadero reclamo para nuestra atención, ya que estamos acostumbrados a verlos apoyados en el suelo y sentimos verdadera curiosidad al contemplarlos y ver cómo se pueden sostener y aguantar nuestro peso cuando nos decidimos a usarlo.
- En cuanto a la limpieza de dicha pieza suspendida, es mucho más practica de realizarla debido a que su colocación permite limpiarlo por casi toda la superficie, sin dejar o dejando lo mínimo por limpiar.
Estas son las ventajas más destacables de los inodoros, bidés y water suspendidos. A continuación vamos a detallar los inconvenientes que presentan dichos sanitarios.
Inconvenientes
- Uno de los principales inconvenientes es el espacio que se necesita para su instalación. Tal y como anttes decíamos, una ventaja era que la cisterna no se encontraba a la vista. Dicha ventaja podría convertirse en un inconveniente, ya que la cisterna ha de estar en algún sitio…y…¿dónde?, pues en estos casos está escondida, ubicada en la pared, en el muro en el cual se encuentra dicho sanitario suspendido. La cisterna debe estar alojada en el muro y ello necesita al menos 8 centímetros más los hierros que sustentan al inodoro para que aguante nuestro peso, con lo cual debemos tomarle a la pared del baño esa medida al menos para su instalación. Osea, contar con un muro más ancho para ello.
- Otro inconveniente es la complejidad de la instalación, ya que dicha instalación lleva más tiempo y técnicamente es más difícil, con lo cual se traduce en más dinero, es más cara la instalación que el inodoro apoyado en el suelo. Mayor coste debido a las piezas especiales como colgadores y cisternas.
- El último inconveniente, está relacionado con la avería. Es posible que la cisterna pudiera averiarse , con lo cual el coste de dicha avería de sanitario, se vería incrementado por tener que abrir el tabique para solucionar el problema de la cisterna.
En resumen, a la hora de decidir si poner un inodoro, bidé o water suspendido, tendríamos que valorar el riesgo de su instalación y/o posible avería frente al diseño. Es verdad que quedan estéticamente muy modernos y contribuyen a un mantenimiento muy práctico del baño.
Y vosotros, ¿ qué pensais al respecto? ¿ Os veis instalando uno en vuestra reforma del baño?.